Todos los años, los últimos días del mes de diciembre, la Delegación de Colombia, nos brinda a las Misioneras del Santísimo, la oportunidad de renovarnos tanto humana como espiritualmente, mediante el encuentro de todas las hermanas, en Medellín. Esta vez hemos estado acompañadas por Monseñor Luis Gabriel Ramírez quien orientó las charlas en torno a la sanación interior, haciendo muchas veces alusión a la vida y santidad de María Emilia, por quien siente profunda admiración y cariño.

También el padre Juan José Janna estuvo con nosotras y orientó su reflexión en dos temas: coherencia e incoherencia de vida y  sobre la Resiliencia.

El padre Humberto Toro, Sacerdote Redentorista, nos acompañó el 31 de diciembre, día en que toda la Congregación, se une en oración y silencio, para agradecer al Señor, para hacer balance del año vivido y poner en sus manos el año venidero.

El tema de este día de retiro fue “La vida fraterna”, don de Dios que hay que guardar como un tesoro.

Fueron días marcados por la oración y reflexión, la liturgia que siempre se ve enriquecida con la participación creativa y dinámica de todas; momentos de fiesta, de celebración gozosa de este tiempo de Navidad en que no puede faltar la natilla, los buñuelos, los regalos, en fin todo aquello que nos recuerda la alegría de tener a Jesús recién nacido entre nosotros. Y como no podía ser de otra manera la Eucaristía de acción de gracias por la beatificación de María Emilia Riquelme, nuestra Fundadora

Por todo ello ¡Gracias, Señor!